El conocimiento del ser humano en el Siglo XXI

Por Adrián García, alumno de 1º de Bachillerato

Hace unas sesiones, en la clase de Filosofía de 1º de Bachillerato, debatíamos acerca de la importancia de la verdad y el conocimiento en nuestros días. En este debate, en torno a la explicación de estos dos conceptos de un nuevo tema, se planteó la siguiente pregunta: ¿El hombre actual con su conocimiento de la verdad es mejor que el protohombre para algunos ignorante?

Antes que nada, debemos comprender el concepto de verdadero. ¿Y qué es la verdad? ¿Será el concepto que le damos a los temas de la ciencia que afirman o desmienten cómo es y cómo funciona algo? En ese caso, ¿no es cierto que, a lo largo de la historia, muchas cosas que se tenían por ciertas en la ciencia, con el paso del tiempo, han sido demostradas falsas gracias a los nuevos conocimientos y saberes? Quizá, la verdad que tenemos como tan cierta, incluso con los recursos que tenemos hoy en día -como son las nuevas tecnologías-, no sea tan cierta como creemos.

Pero imaginemos, solo por un momento, que todo lo que explica la ciencia con total seguridad, ya sea a favor o en contra de un tema, sea verdad. Desde este punto de vista, el hombre actual, tiene una clara ventaja, ya que, no solo disponemos de mayor conocimiento y saber que el hombre primitivo, sino que también de más cantidad de medios para indagar en temas científicos. Sin embargo, es cierto que todos los recursos que tenemos actualmente son gracias al protohombre «ignorante», que de ignorante tiene bien poco.

Y no solo recursos, ya hablamos de palabras mayores cuando decimos que la mayoría de conocimientos que hemos adquirido a lo largo de la historia, ha sido consecuencia de que el hombre primitivo se preguntara el porqué de las cosas. Pongamos un ejemplo, el fuego mismo: si el primer hombre que descubrió el fuego no se hubiera preguntado acerca de dónde venía esa fuerza poderosa tan misteriosa, otro no hubiera elaborado la hipótesis de que los fenómenos naturales están sometidos a la voluntad de los dioses, razón en la que se basa el saber mítico. A su vez, esta teoría o creencia fue desarrollándose con el paso de los siglos, hasta que desembocó en la verdad que todos conocemos hoy en día: que el fuego se produce por una reacción química llamada combustión, que se da cuando combinamos el oxígeno, un combustible y el calor.

Estamos cegados por lo que nos ofrecen las nuevas tecnologías, esa rapidez de encontrar una información que deseemos con tan solo un clic, y no nos paramos a reflexionar ni a pensar sobre ella

Por otro lado, no todos los temas tienen una verdad predeterminada. Solo hay que fijarse en la Filosofía, la cual no acepta ninguna afirmación como incuestionable. Por lo tanto, hay algunos saberes que no dependen ni requieren de la verdad. La verdad en ellos, es la que cada uno le dé. Y en ese sentido, el hombre actual es más ignorante que el primitivo. Estamos cegados por lo que nos ofrecen las nuevas tecnologías, esa rapidez de encontrar una información que deseemos con tan solo un clic, y no nos paramos a reflexionar ni a pensar sobre ella. Pero los hombres del pasado sí se preguntaban el porqué de las cosas, de dónde venían, por qué sucedían, etc. Se preguntaban todo acerca de lo que para ellos era nuevo.

En conclusión, desde mi punto de vista, en muchos aspectos, el hombre actual culto parece ser el ignorante, y el protohombre ignorante parece ser el culto.